Bill Gates se despide de la presidencia de Microsoft, pero su cuota de poder aumenta. Tras meses de especulaciones la incógnita ya se ha desvelado y Satya Nadella se convertirá en el nuevo CEO de la compañía.
Sin embargo, la salida de Gates de la compañía que él mismo fundó no será total. Todas las informaciones apuntan a que el ya ex presidente jugará un papel fundamental en la nueva estrategia de la compañía desde el puesto de asesor de tecnología, un cargo con el que estará estrechamente ligado al nuevo CEO.
El anuncio de la compañía vino acompañado de un vídeo en el que Gates indicaba que “aumentará el tiempo que dedique a la compañía” y que tendrá varias reuniones con los diferentes equipos de producto en Microsoft.
Según el profesor del IE Business School Enrique Dans, experto en tecnologías, los cambios en la dirección de Microsoft no suponen tanto «el cierre de la era Bill Gates sino de la era Steve Ballmer».
Tras una «nefasta» política de «convulsiones» en sus decisiones, «cualquier cosa después de Ballmer será mejor», ha dicho Dans, quien confía en las cualidades de Satya Nadella como máximo directivo, porque sus valores de liderazgo y gestión parecen de momento muy distintas a las del anterior: «Más conciliadoras, relajadas y tranquilas».
Sin embargo, ha añadido, lo lógico sería que Bill Gates, como fundador de la empresa, siguiera manteniendo su «influencia» en cuestiones como asesoramiento al nuevo consejero delegado de la compañía, aunque sin tomar él las decisiones.
Sobre Ballmer ha recordado que era un hombre «permanentemente equivocado», con una batuta dirigida a base de «espasmos» y sin capacidad para prever el éxito que tendrían innovaciones tan populares ahora como el iPhone o el sistema operativo para dispositivos móviles Android (de Google).
Respecto a Bill Gates, ha valorado que subsanara errores a tiempo como comprender finalmente lo positivo del concepto de «la apertura» en la innovación, algo en lo que inicialmente no creía, ha dicho Dans; desde su fundación, Bill Gates «ha sabido entender la supremacía de los sistemas abiertos en internet».
Por su parte, el periodista experto en internet Mario Tascón se ha referido al fundador de Microsoft como una persona que llevaba ya tiempo retirada del frente de la empresa, con una enorme dedicación a su fundación. No obstante, eso no quita para que en el futuro siga siendo «un referente» en la compañía, ha añadido.
Tascón intuye que, desde su nuevo puesto como asesor tecnológico, Bill Gates contará con momentos de mayor vinculación con la empresa, especialmente si las cosas no van bien, para ayudar a enderezarlas. En su opinión, «es difícil asegurar si su retirada es definitiva o si por el contrario supone el inicio de una nueva etapa» de compromisos, tras «los disparates» del último gestor. «El cambio estaba cantado, era algo que se tenía que hacer».
Se ha referido al nuevo puesto de Bill Gates como el del sabio en contacto con sus inventos. Se trata de un cargo «también importante y complejo», pero con la ventaja de estar «alejado de la dureza de las ventas y del mercado».
Tascón ha reiterado su opinión de que la decisión de Bill Gates parece «la confirmación de una despedida» del frente de la empresa, un paso que le regalará tiempo para imaginar nuevos proyectos, pero los entresijos de su decisión sólo los conoce él.