Algunas grandes marcas consiguen convertirse en auténticos estamentos sociales y culturales, pasando incluso a dar nombre al producto que fabrican.
Es el caso de la marca Kleenex, que popularmente se utiliza para referirse a los pañuelos de papel, sean de la marca que sean. Otro ejemplo es la marca Frisbee, que ha pasado a ser sinónimo de ‘disco volador’.
Conseguir llegar a este estatus es un sueño para las marcas, pero a veces esto puede llegar a traer problemas, sobre todo si tenemos en cuenta las implicaciones legales con respecto al copyright que puede acarrear la introducción del nombre de una marca en el lenguaje popular
A este problema se está enfrentando la exclusiva cadena de joyerías Tiffany & Co, que se encuentra inmersa en una batalla legal con la empresa de venta al por mayor Costco a la que ha acusado de infringir su marca registrada al vender un producto al que llama anillos de compromiso “Tiffany“, según informaciones publicadas por BBC News y Periodista Digital.
La empresa estadounidense Costco ha contraatacado argumentando que Tiffany ya se ha convertido en un término genérico para denominar este tipo de anillos solitarios.
Lo más curioso de este caso es la decisión provisional de la jueza que lleva el caso, que ha fallado a favor de los argumentos de Costco concluyendo “que existe una genuina disputa factual sobre si la marca registrada tiene un significado principalmente genérico en la mente del público en general”.
El caso tendrá otra audiencia este junio pero, si eventualmente se falla a favor de Costco, la marca registrada de uno de los anillos más famosos de Tiffany & Co. podría terminar en el cementerio de las marcas registradas acompañando a otras como Yo-yo, termo o celofán.
La Organización Mundial de Propiedad Intelectual ya ha dedicado artículos a esta problemática con afirmaciones como la siguiente: “los interrogantes sobre la atenuación de una marca registrada han cobrado una renovada importancia con el auge del comercio electrónico y el surgimiento de intermediarios de nuevos mercados como eBay y Amazon”.
El debate está abierto, y la lucha de las marcas por mantener intacta la exclusividad de su nombre también. ¿Quién ganará en esta guerra de nombres y marcas?
(Fuente: marketingdirecto.com)