Casos abundan: está el del joven que buscaba empleo y consiguió una entrevista de trabajo, a la cual llegó 15 minutos tarde, no sólo omitiendo ofrecer una disculpa, sino además preguntando al entrevistador si tenía un bote de basura para poder tirar su chicle.
O el otro de la chica, también en sus veintitantos, cuya conversación telefónica con el director de recursos humanos de la empresa en la que buscaba entrar se vio abruptamente interrumpida. La joven no llamó de nuevo sino hasta después de dos horas, sólo para explicar, sin pedir disculpas, que se le había caído el teléfono en una tina de agua mientras le hacían manicure. Luego está el triste caso de la madre que llamó al ex jefe de su hijo exigiendo saber por qué no fue contratado al final de su periodo como becario, reseña Susan Adams en su artículo para Forbes Magazine.
Dani Ticktin Koplik, de 59 años, una coach ejecutiva y de rendimiento con sede en Englewood, Nueva Jersey, tiene un montón de historias como éstas. Durante los últimos años, la mitad del tiempo de oficina de Koplik se ha ido en capacitar a la llamada Generación Y, o del Milenio, que busca empleo. Este grupo, de entre 20 y 32 años comete una serie de errores en su búsqueda de empleo, que van desde la arrogancia y la falta de respeto a la autoridad hasta la sobreprotección paternal.
Le pedí a Koplik una lista de los errores más comunes de los veinteañeros, y me dio muchísimas ideas. He aquí su lista de las 10 primeras.
1. Actuar de forma arrogante
Una de las consecuencias de la sobreprotección paternal es que los jóvenes sienten que merecen un camino cubierto de pétalos de rosas. Koplik refiere el caso de un becario, quien en su primer día informó a su supervisor que tenía que salir temprano ese jueves para tomar una lección de equitación. “No pude hacer que esta persona cayera en cuenta de que estaba siendo totalmente inapropiada y estaba saboteando su carrera”, dice Koplik.
2. Comenzar el proceso demasiado tarde
Lo ideal es que los estudiantes universitarios empiecen a buscar un puesto de becario en empresas en las que les gustaría trabajar después de su primer año escolar. Los estudiantes que asumen que van a conseguir empleo casi sin esfuerzo esperan demasiado tiempo para comenzar el proceso.
3. Subutilización de la red de ex alumnos de su escuela
Aunque los padres y sus amigos pueden ser una buena fuente de contactos, la red de profesionales egresados que yace en las universidades debe ser uno de los primeros lugares a los que un joven postulante debe mirar.
4. Uso de un currículum descuidado y demasiado centrado en sí mismo
Los solicitantes jóvenes con frecuencia tienen grandes debilidades en aspectos básicos de su currículum, como la claridad, el orden, el cuidado ortográfico y sintáctico, y el uso de palabras clave en la descripción del trabajo. Otro gran problema: la sección “objetivo” tiende a enfocarse demasiado en lo que quieren, y no lo suficiente sobre el posible empleador. Por ejemplo, los solicitantes jóvenes suelen decir: “Entrar en una posición en la que pueda usar mis habilidades, ideas y entusiasmo, y en el que pueda aprender mucho.” En cambio, el énfasis debe estar en lo que pueden aportar a la empresa. Los solicitantes también deben dejar fuera puestos de trabajo de baja categoría, a menos que puedan cuantificar sus logros.
5. Escribir cartas de presentación que repiten el currículum
Muchos de los solicitantes jóvenes regurgitan los logros enumerados en su currículum en sus cartas de presentación. En cambio, las cartas de presentación deben ser cortas y directas, y decir algo concreto sobre lo que el solicitante puede aportar a la empresa en la que quiere trabajar.
6. Hacer una investigación pobre
Los solicitantes jóvenes a menudo simplemente echan un vistazo al sitio web de la compañía antes de una entrevista. En su lugar deben leer todo el contenido del sitio, buscar notas de prensa sobre la empresa y hacer seguimiento de la información de redes sociales.
7. No limpiar sus perfiles de redes sociales
Todas esas fotos de borrachos o en bikini que pueden verse en Facebook deben ser eliminadas o bloqueadas con la configuración de privacidad. Todos, incluyendo a los estudiantes universitarios, necesitan un perfil pulido en LinkedIn.
8. No mostrar aprecio suficiente por el entrevistador
A menudo los candidatos millennials no logran concluir una entrevista con una expresión de gratitud por el tiempo del entrevistador. Recuerden: siempre se debe agradecer al entrevistador en persona, dejarle claro que se consideraría un privilegio trabajar en la empresa, y también preguntarle sobre el siguiente paso en el proceso. A continuación debe enviarse un correo electrónico agradeciendo aspectos específicos tratados en la entrevista.
9. Incapacidad para reconocer su sitio generacional
Koplik habla del becario que al final de su tiempo de trabajo entró en la oficina de uno de los directores de la empresa y le dijo: “¿Podría darte retroalimentación sobre mis prácticas?” Los jóvenes están tan acostumbrados a ser incluidos en las conversaciones que no alcanzan a comprender su posición en la jerarquía.
10. Dependencia de los anuncios y ferias de empleo
Escribo esto en cada artículo sobre los errores de búsqueda de trabajo porque es un problema crónico. Koplik dice que los solicitantes jóvenes lo cometen también: pasan demasiado tiempo aplicando para anuncios en línea y asistiendo a ferias de empleo anónimas. Lo decimos una y otra vez: la gente encontrará trabajo a través de la gente que conoce; rara vez a través de un anuncio. Si ves un anuncio para un puesto de trabajo, trata de encontrar una conexión personal en la empresa y úsala como tu punto de entrada, señala Susan Adams.